Santiago T. Peredo | @STocaPeredo
El Atlético, inmerso en la polémica de la Superliga, regresó a los entrenamientos tras una jornada de descanso después de vencer por 5-0 al Eibar.
Pese a todo lo que está pasando en el mundo del fútbol, Simeone y sus hombres sólo tienen una cosa en mente, la victoria ante el Huesca.
La sesión de hoy martes tuvo lugar en el Cerro del Espino y estuvo basada en su primera mitad en la readaptación y en la segunda en ejercicios con balón.
El Cholo entrenó con toda la plantilla a excepción de Luis Suárez y Vrsjliko, que tienen imposible llegar a la cita del jueves. No obstante el uruguayo se entrenó en solitario (ejercicios de carrera, de cambios de dirección y desplazamientos a media distancia de balón bajo) junto al doctor Celada, quien está gratamente sorprendido con la evolución del Pistolero.
Por el contrario, Joao Félix y Lemar no saltaron al verde y se quedaron en el gimnasio, aunque los servicios médicos creen que llegarán para entrar en la convocatoria.
Así las cosas, el técnico argentino no arriesgará lo más mínimo con ninguno de ellos, ya que los considera claves para la recta final del curso y sobre todo para el crucial duelo ante el FC Barcelona.
Visita de Gil Marín y Cerezo
El consejero delegado y el presidente se acercaron a la Ciudad Deportiva de Majadahonda para tranquilizar a la plantilla con respecto a las falsas informaciones que están surgiendo sobre la Superliga.

Las dudas principales de los futbolistas eran acerca de las posibles represalias de la FIFA y la UEFA, ante las que han transmitido un mensaje de tranquilidad, al mismo tiempo que dejaban claro que no se deben distraer del objetivo de la temporada, LaLiga.
«Estad tranquilos y pensad en el Huesca. El objetivo está intacto y hay que seguir peleando por él: ahora mismo sólo importa el Huesca», este ha sido el mensaje de Gil Marín y Cerezo a sus hombres.